Siempre he querido estar allá. Todos mis sueños me llevan a ese lugar.
No quiero ser prisionera del estatus, ni del perfil. Quiero pasión, de esa que mueve cada célula que hay en mí. Quiero apasionarme y que se note mi sonrisa.
Quiero la vida que quiero. No soy mujer de cuatro paredes. Soy mujer de escenarios. Escenarios fuera del menos seis y cerca del mas cero.
No quiero ser la sombra de lo que ya hay. Quiero ser la silueta de lo puedo llegar a ser.
Estoy cansada de seguir queriendo... y que nada pase.
"...y que se note mi sonrisa ". Bella línea.
ResponderEliminarPara llegar a la pasión es buena la lujuria, aunque los curas católicos la condenen. Vivi, usted no ha vuelto a mi blog. Al menos, póngale pasión a eso de visitar blogs amigos, yo me encargo de lo demás, ajajajaj, un abrazo.
ResponderEliminarLinda entrada, de eso estamos hecho todos, aunque algunos tomen más acciones que otros para llegar ahí.
ResponderEliminarCanaado: Eso creo es lo más importante.
ResponderEliminarWilliam: En este caso la lujuria no me va a dar la pasión cotidiana que necesito... esa satisface otras pasiones. Y sí lo visito, lo leo frecuentemente, sólo que no he comentado.
Haze: Al final de cuentas es asunto de decidirse.
Vivi no hay fórmulas, cada cabeza es un mundo. A mí me motiva hacer lo que me gusta, por eso trabajo en lo que trabajo9, por eso como tanto, porque me encanta comer y por eso también me entrego a la lujuria cuando se puede, porque esas pasioens también son parte del día a día de un ser humano de carne y hueso.
ResponderEliminarSaludos
Hattori
Sartencaliente.blogspot.com
Aunque no lo creas, sí pasa algo, aunque no necesariamente lo que una quiere ;)
ResponderEliminarKatmarce--
submarinopimienta.blogspot.com
Vivi: yo vivo de sus letras en mi blog y usted no me deja comentarios.
ResponderEliminar"Estoy cansado de seguir queriendo... y que nada pase."
Aunque Kat dice que algo pasa, pero no cuenta qué...